A quien engaño.. te has convertido en una droga difícil de controlar,
Te has vuelto dueño de mis viernes, sábados y domingos... que và.. las noches ya son tuyas..
Voy descubriéndote la piel y la acaricio con el pensamiento... Siento que voy a perder este juego
no tengo estrategia, no tengo razones ni justificaciones.
A medida que avanza tu juego me voy preguntando
que es lo mejor: luchar o rendirme...y me rindo, me rindo.
Pero mis ojos se cansaron de ver y mis manos quieren tocar.
Hacer el amor con tu cuerpo y dejar de fantasear.
Pero, no quiero perder y enamorarme de ti.... no quiero arruinarlo.